Por desgracia, vivimos unos momentos difíciles y por las circunstancias a muchos nos toca trabajar desde casa.

Puede parecer una opción muy cómoda a simple vista.

Pero si no estamos acostumbrados, puede resultarnos complicado coger el ritmo para ser tan eficientes como si estuviésemos en la oficina.

Colección Office, composición Nova 12

En el post de hoy te damos algunos trucos para teletrabajar desde casa con éxito.

Ventajas del teletrabajo

Sin duda su mayor ventaja es la flexibilidad.

Trabajar desde casa nos permite organizarnos como mejor nos convenga, sin tener que ceñirnos a un horario concreto.

Esto es ideal para conciliar nuestra vida laboral con la familiar.

Otro gran beneficio se produce en cuanto a los desplazamientos se refiere.

Podemos amortizar todo nuestro tiempo en tiempo de trabajo, olvidándonos de los atascos y del tráfico.

Esto también se traduce en menos estrés y mejor calidad de vida.

El teletrabajo tiene más ventajas que desventajas.

Aunque está claro que tenemos que ser disciplinados y cumplir con nuestros objetivos.

Te damos unos cuantos trucos para que tu trabajo sea totalmente eficiente.

Consejos para teletrabajar con éxito 

Lo primero es tener un espacio habilitado para ello, ya que sentirnos cómodos es imprescindible.

Es aconsejable que sea un lugar específicamente para trabajar.

Colección Office, composición Nova 03

Lo ideal sería poder disponer de un despacho conformado con todos los elementos que vamos a necesitar para llevar a cabo nuestra labor.

Una mesa amplia, una silla cómoda y espacio de almacenaje suficiente para documentos o cualquier material que necesitemos.

Hay que fijarse un horario.

Aunque como hemos comentado, al trabajar desde casa tenemos una mayor flexibilidad, pero eso no quiere decir que no haya que marcarse una jornada laboral.

No estamos en la oficina, pero hay que pensar que sí

Que no estemos en la oficina físicamente no significa que no estemos.

Debemos establecernos los horarios de nuestra jornada.

Es conveniente no quedarse en pijama.

Está claro que podemos prescindir de la ropa más formal que usábamos para ir a la oficina, pero debemos vestirnos, aunque sea con ropa más informal.

Hay que planificarse.

Al igual que haríamos si estuviésemos en el trabajo, hay que cumplir ciertos objetivos.

Es conveniente planificar nuestro trabajo, demos semanal por ejemplo, para realizar todas las tareas necesarias.

Aunque estemos en una situación de teletrabajo “obligada” debemos mantener el contacto con nuestros jefes y compañeros y mantener una comunicación fluida.

Si realizábamos reuniones semanales, por ejemplo, las podemos seguir manteniendo de forma telemática.

Debemos mantener los mismos hábitos.

Realizar los mismos descansos que hacíamos en la oficina, parar para tomarnos un café o almorzar o para estirar un poco las piernas.

Es tentador tener la nevera tan cerca, pero tenemos que intentar no estar continuamente picoteando.

Además, tenemos que separar el trabajo del resto de labores del hogar.

Si estamos dentro del horario de trabajo, hay que intentar no poner lavadoras o ponernos a limpiar los baños en medio de lo que nos hemos marcado como jornada laboral.

Lo importante es ser disciplinados sin olvidarnos de las múltiples ventajas que tiene trabajar desde casa.