La feria ‘I Saloni’, que cada año se celebra en Milán, era la gran esperanza para los líderes del mueble valenciano para acabar este ejercicio 2010 con números negros. El certamen italiano es el líder indiscutible de Europa porque congrega a las principales fábricas y compradores del mundo, tanto tiendas como decoradores y arquitectos, con más capacidad de compra y de influencia del mundo. Sin embargo, este año los fabricantes de la Comunitat han vuelto de Milán sin un rostro de felicidad absoluta.
Según explica Antonio Almerich, que presentó en Milán su nueva línea de mobiliario auxiliar moderno (históricamente su empresa se ha dedicado a lámparas clásicas), ‘I Saloni’ ha tenido dos partes muy diferenciadas. La feria se celebró desde el miércoles 14 hasta el lunes 19. «Hasta el viernes la feria ha sido un éxito. Hemos mostrado nuestro producto, ha tenido una gran aceptación y hemos realizado contactos muy interesantes pero, a partir del viernes, la feria ha caído mucho».
La nube de ceniza volcánica, que colapsó los aeropueertos europeos, ha impedido que los americanos, asiáticos y europeos que tenían previsto acudir al certamen a partir del viernes pudieran llegar a Milán. «A partir del viernes la feria no tenía visitantes nuevos. Hemos vuelto a hablar con los que ya habíamos contactado pero no ha sido tan productiva la primera parte como la segunda», explica José Picó, de Muebles Picó, que ha presentado su nueva colección de cocinas clásicas, un tipo de producto que ya mostró en la última feria del hábitat celebrada en Valencia el septiembre pasado.
Gandía Blasco, uno de los referentes valencianos del mueble moderno y cuya marca es conocida en prácticamente todo el mundo, el balance de la feria es «positivo» aunque «los tres últimos días ha disminuido la afluencia de visitantes».
A pesar de esta disminución de las oportunidades para lograr negocio, los fabricantes valencianos ven una oportunidad en este problema. «La feria Habitat Valencia tiene delante una gran oportunidad para consolidarse como el segundo certamen más importante de Europa, porque las novedades que los fabricantes han querido presentar en ‘I Saloni’ no han podido llegar a los compradores de Estados Unidos, Sudamérica y Asia, que no se han podido desplazar a Milán», explica José Picó.
El futuro inmediato para el sector del mueble, según Picó, es de un macht ball definitivo para su certamen ferial. «Valencia se tiene que consolidar más todavía este año si quiere empezar a subir peldaños. Tendremos una oferta obligada porque los que no han podido acudir a Milán van a tener que venir para conocer las novedades». El presidente de la federación del mueble añade que es también el «momento» de certificar que Feria Valencia es el referente después de Milán y el lugar donde se muestra la oferta del mueble español «y dejar de mirar a otros experimentos que no tienen importancia», en referencia a la feria del mueble de Zaragoza que aglutina la oferta de calidad baja y media que no acude a Valencia por el diferencial de precio.
Almerich añade: «Hay que ver esa parte positiva de la feria porque en Valencia pueden venir muchos de los que no han llegado a Italia». Gandía Blasco se manifiesta en la misma línea y confirma que «quizás Habitat tenga un mayor número de visitantes», aunque matiza: «Todo depende de cómo se encuentren los mercados en septiembre».
Uno de los factores que se ha puesto de manifiesto tanto en Milán como en Francfort es que el mercado americano, tanto del norte como del sur, está experimentando una cierta recuperación ayudada por el impulso de la economía estadounidense y la depreciación del euro.